miércoles, 5 de enero de 2011

El período de Deshacimiento

 
Durante este período, cambios comienzan a ocurrir en nuestra vida en preparación para desatarnos psicológicamente a lo que valoramos como importante. Un Curso de Milagros me recuerda: "Durante este periodo parece como si nos estuviesen quitando las cosas, y raramente se comprende en un principio que estamos simplemente reconociendo su falta de valor." M-4.IA3: 3 Debido a que nada de este mundo tiene valor puesto que todo es una ilusión, cuando empezamos a perder, o mejor dicho, forzados a desatarnos de lo que consideramos valioso o importante, ya que aún no hemos reconocido el hecho de que carecen de valor alguno, experimentamos muchísimo dolor. No porque la experiencia sea dolorosa, sino debido a nuestra falta de confianza en lo que realmente está sucediendo. El Curso dice entonces: "¿De que otro modo se iba a poder percibir lo que no tiene valor, a no ser que el perceptor estuviese en una posición desde la que no puede sino ver las cosas de otra manera?" M-4.IA3: 4

En otras palabras, mientras te estás aferrando a una ilusión, no eres capaz de percibir la falta de valor que la misma tiene. Pero una vez que la dejas ir, o te encuentras forzado a dejarla ir, desde ese punto de vista diferente puedes ver la falta de importancia que la misma tenía.

A través de ese tipo de desprendimiento completo te das cuenta de que todo el dolor y el sufrimiento que experimentaste al aferrarte a lo que no querías dejar no era necesario. Te pido por favor que no confundas lo que acabo de decir con el viejo dicho que dice: "El tiempo lo cura todo." El tiempo no cura nada, sólo esconde la culpabilidad hasta que se presente una oportunidad para proyectarla nuevamente en forma diferente.

Esa culpabilidad inconsciente sanará en proporción directa a tu disposición de entregarle tus pensamientos al Espíritu Santo. En otras palabras, si estas dispuesto(a) a entregárselo todo al Espíritu Santo hoy, sanas hoy, si se lo entregas mañana, sanarás mañana, si se lo entregas a través de un millón de reencarnaciones, sanaras en un millón de reencarnaciones. Es tu decisión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario